miércoles, 6 de julio de 2011
El coleccionista de amigos.
Pasaba la mayor parte del día solo, pero no le importaba, pues era feliz en su casa, con sus cosas, pero a la vez, le atenazaba la sensación de ser antisocial, y por ello, se dedicaba a coleccionar amigos. Era algo así como un hobbie que le hacía sentirse mejor consigo mismo.
Lo hacía en cualquier situación, estuviera de viaje, comprando, o paseando al perro. Se comportaba de forma abierta con todo el mundo, era simpático, y luego trataba por todos los medios de no perder el contacto con esas personas, aunque resultase que no le caían bien.
Pero así era feliz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Cuantos más amigos tienes menos son de verdad.
ResponderEliminarSecundo la frase anterior.
ResponderEliminarNunca podré comprender a esa gente. Que te habla sin parar, tú les pones caras de ¿me dejas? Y siguen. Y siguen... y siguen.